12 de enero de 2015

Constituyes la herida de mi corazón

P  u  ñ  a  l 
 
 
Lado izquierdo de mi caja torácica,
golpe certero de dolor,
convulsión estruendosa de amor,
víctima de la historia melancólica jamás contada.
Lado izquierdo de mi caja torácica,
invasión de destrucción
y habitación de corazón
hundido tras un paso por él.
Lado izquierdo, lado derecho, qué más da,
poblaste cada incierto rincón
de mi ser con solo una pasada
(de ti por mi vida).
 
 
T  ú
 
 
Mirada.
Mirada tímida que finge no serlo y expresa más que cualquier otra.
Herida.
Herida interna por aquella mirada que expresa más que cualquier otra.
 
 
A  m  o  r
 
 
Erizó mis sentidos hasta el punto de
no poder elaborar respuesta.
Agitó mi pulso hasta el punto de
padecer carencia de respiración.
Revolución.
Lado izquierdo de mi pecho,
lugar de la revolución que fuiste tú.
Dolor, dolor, dolor,...
 
 
Porque, ¿qué fuiste sino un puñal
constituido por Tú,
forma desconocida hasta ser conocida,
con una sola mirada?
Me heriste de muerte,
de amor,
de dolor,
de vida,
con tu mirada.
Eres aquel puñal que me hirió de sentimientos y dejó una herida que no parece cerrarse.


No hay comentarios:

Publicar un comentario